¿Qué significa ser vidente?
A lo largo de la historia nos hemos topado con miles de personas que afirman tener poderes especiales más allá de nuestro entendimiento, personas que pueden hacer y percibir cosas que un ser humano regular no puede, pero… ¿Qué hay de cierto en eso? Para empezar, primero debemos responder algunas preguntas importantes.
¿Qué es un vidente?
Un vidente es alguien que posee un “don” y puede “ver” la forma en la que los eventos se desarrollan mediante visiones y posiblemente predicciones del futuro, pero no es un don que pueden usar de la misma forma que magos y hechiceros. Las visiones de un vidente a menudo son metafóricas, y también tienen la habilidad de ver el aura de una persona.
El don de un vidente está relacionado con el sentido de la vista. Cuando un vidente ve a una persona, puede percibir su aura. El aura se describe como la forma física de las emociones y creencias de esa persona. Un vidente puede discernir lo que esa persona está experimentando emocionalmente al leer su aura, así como también saber qué está causando esas emociones y que tan fuertes son. Muchos manifiestan que las auras revelan las intenciones que tiene una persona.
El aspecto más importante de este don, son las visiones. Las visiones son una forma vaga de profecía que los videntes pueden experimentar. Sin embargo, los videntes no pueden controlar estas visiones pues se activan cuando se percibe el aura de alguien. Un vidente no siempre tendrá una visión cuando lea un aura, pero cuando lo haga, es muy probable que la visión involucre a esa persona.
Las visiones llegan en dos formas, metafórica y literal. Las visiones literales básicamente revelan un evento que aún no ha sucedido. A pesar de que este tipo de visiones siempre se hacen realidad, no siempre suceden de la manera en que el vidente espera.
La segunda forma es la metafórica, se parece mucho a las visiones de los profetas. En ellas, el vidente percibe escenas de tiempos pasados, símbolos, señales y eventos que tienen un significado diferente al sentido literal.
Pero más que saber lo que va a pasar, un vidente trata de comprender el contexto y la situación de una persona, para así tomar grandes cantidades de información intangible e interpretarla como algo significativo para ellos. Las personas a menudo se sienten profundamente escuchadas e íntimamente entendidas por videntes, ya que tienden a ser grandes oyentes.
Un vidente se siente lleno de energía al conectarse con las personas, imaginar y meditar les da una sensación de amplitud. Estar conectados con sus ideas les da mucho tiempo para reflexionar sobre el bienestar de las personas porque disfrutan creativamente de la resolución de problemas complejos.
Los videntes se caracterizan por ser individuos amorosos que aceptan a los demás, especialmente a aquellos que han sido marginados o humillados. Lo que a muchos videntes les lleva mucho tiempo aprender es cómo darse ese mismo amor y aceptación. Un vidente puede ser peculiar, un tanto inusual y tener problemas para adaptarse a las normas sociales, no es extraño que sientan que no pertenecen a ninguna parte.
Uno de los actos más valientes de un vidente es aceptarse y amarse tal cual es. Cuanto más sintonizado y en paz este un vidente con su propio ser, más internamente se sentirán conectados con él.
El regalo de los videntes es su capacidad de ver a través de las personas, ideas o circunstancias en un contexto generalizado. Donde otros solo pueden ver lo que está en frente de sus narices, los videntes pueden dar un paso atrás y colocar una situación en el contexto de una historia más grande. En resumen, ninguna persona o situación es un fenómeno aislado, todo está conectado.
¿Cómo reconocer a un falso vidente?
Si te encuentras con una de estas personas que afirman tener un don especial, y notas que están particularmente interesados por tu dinero, es muy posible que se trate de una estafa. Lo primero, es hacer una investigación del vidente que desees contactar en los principales foros de Internet, especialmente en el “foro de videntes” si no aparece en ninguno de ellos, entonces considérelo un estafador. También puedes buscarlo en sus redes sociales, reseñas, e incluso opiniones de personas conocidas.
Algunos falsos videntes dicen querer hacerte un seguimiento y te piden cierta cantidad de dinero diariamente, otros dicen querer lo mismo y cuando les pagas, dejan de contestarte las llamadas.
Por otro lado, a veces no se trata del dinero, muchos se han quedado decepcionados después de consultas porque no se les realizó un ritual de manera correcta o el ritual al que fueron sometidos no era el más adecuado para su situación, en ese caso, no estás ante un estafador pero sí ante un mal profesional.